El origen del nombre de 'España' no viene de Hispania ni de Al-Ándalus, según un historiador

Los rayos de sol atraviesan la neblina en la Muralla de Ávila, este jueves. EFE/ Raúl Sanchidrián

Adrián Roque

15 de marzo de 2025 11:00 h

4

A lo largo de la historia, España ha recibido distintos nombres según las civilizaciones que la habitaron o la exploraron.

Desde la Hispania romana hasta Al-Ándalus morisca durante el dominio musulmán, cada periodo ha dejado su huella en la denominación del territorio.

Sin embargo, un estudio sugiere que el nombre de Iberia, por el que los griegos conocían la península, no tiene su origen en el río Ebro, como comúnmente se cree, sino en un curso fluvial de la actual provincia de Huelva.

Un origen onubense para el nombre de Iberia

Según el historiador Antonio García y Bellido en su obra Los más remotos nombres de España, la denominación de Iberia no provendría del río Ebro, sino de un río situado en la región de Huelva, posiblemente el Tinto o el Odiel.

Su teoría se basa en un importante texto sobre geografía descriptiva de la Hispania prerromana: la Ora Marítima, obra del poeta latino Rufo Festo Avieno, del siglo IV d.C.

En este documento, al describir el litoral onubense, Avieno menciona un río llamado Hiberus y añade: “Muchos sostienen que de él han recibido su nombre los iberos y no del río que corre por entre los inquietos vascones”.

Esta afirmación contradice la creencia extendida de que el nombre Iberia se derivaba del Ebro, situando su origen en el suroeste peninsular.

De acuerdo con García y Bellido, los antiguos griegos y púnicos conocieron primero la región de Huelva, pues en ella se hallaban importantes centros mineros y comerciales, mucho antes de que el Este peninsular adquiriera relevancia en la historia.

Los igletes: un pueblo clave en la denominación

En el escrito del poeta latino, se especificaba que este río atravesaba una región en la que habitaban los igletes, un pueblo que, según el historiador, habitaba la región de Huelva en la época en que fue escrito el periplo contenido en la Ora Marítima.

En sus investigaciones, García y Bellido plantea que estos igletes, también conocidos como gletes en textos de Theópompos, pudieron haber sido determinantes en la transmisión del nombre Hiberia a los navegantes griegos.

A diferencia del Este peninsular, donde los exploradores mediterráneos no encontraron riquezas destacadas en sus primeros contactos, el Sur ofrecía un escenario mucho más atractivo para el comercio.

Huelva y sus alrededores contaban con ricos emporios y centros mineros de gran importancia, entre ellos las minas de cobre y las explotaciones de Tartessos, célebres por sus depósitos de minerales y su conexión comercial con regiones como Galicia y las islas británicas, de donde provenía el estaño.

Un nuevo enfoque sobre los nombres de España

Esta teoría refuerza la idea de que el primer contacto de los griegos y los púnicos con la península ibérica se produjo en la región occidental y no en la oriental, como tradicionalmente se ha considerado.

En este contexto, el río Hiberus mencionado por Avieno habría dado nombre a la península y a sus habitantes, mucho antes de que la denominación Hispania se extendiera con la llegada de los romanos.

En definitiva, el origen del nombre Iberia podría no estar en el Ebro, sino en el suroeste de la península, en un enclave fundamental para las civilizaciones antiguas por sus riquezas minerales y su importancia comercial.

Esta visión ofrece una nueva perspectiva sobre los primeros nombres de España y el papel crucial que desempeñó la región de Huelva en la historia de la península.

Etiquetas
stats