Educación Ambiental para la generación de empleos por el clima

El 26 de enero se conmemora anualmente el Día Mundial de la Educación Ambiental, buscando despertar la conciencia de las personas sobre los problemas ambientales; poniendo el foco en la importancia que debería tener la educación, la divulgación y la sensibilización ambiental en la sociedad y en la manera en la que podemos actuar para revertir su degradación.

Este año, la desolación causada en nuestro territorio por la Dana, ha despertado con fuerza la conciencia de la emergencia climática, que había pasado a un segundo plano con la crisis del COVID-19. En ese momento el gobierno valenciano acababa de declarar la emergencia climática en nuestra Comunitat, pero la pandemia cambio esa realidad que hoy de nuevo, vuelve la preocupación de la ciudadanía ante los efectos derivados del calentamiento global. Por ello es importante que éste sea bien explicado y que se neutralicen los negacionismos alimentados por lo bulos y la desinformación.

Para ello, la educación ambiental es un proceso que permite aumentar el conocimiento de la población sobre esta problemática, produciendo cambios a través de acciones más sostenibles realizadas en el día a día. Por tanto, su objetivo no es sólo transmitir conocimiento científico, sino producir un impacto social que, en última instancia, contribuya a generar un efecto positivo en el entorno. No se reduce, ni mucho menos, a añadir una asignatura en las escuelas.

Desde el sindicato reivindicamos que no hay que perder de vista las distintas realidades sociales para conseguir una transición ecológica que no deje a nadie atrás, por lo que es importante introducir la perspectiva eco-social en las iniciativas de educación ambiental. De esta forma, los cambios pueden ser mejor aceptados por la población, siendo así más fácil poner en marcha las medidas necesarias.

Los educadores y las educadoras ambientales que trabajan en­ el ámbito sindical están viendo que las políticas ambientales están teniendo cada vez más impacto en los temas laborales, por lo que es importante tratar el tema desde la óptica de la transición justa. Además, a través de la acción sindical se puede implementar una educación ambiental que trate de involucrar a las personas trabajadoras en la transición ecológica de las empresas, en lugar de enfrentar el empleo con la protección del medio ambiente.

Y esta ha sido la visión que nos ha inspirado a la hora de preparar un paquete de recursos educativos que hemos desarrollado en conjunto con nuestro Instituto Sindical de Cooperación al Desarrollo (ISCOD-PV), en colaboración con Educar en Valor y el Gabinete Técnico de Medioambiente de UGT-PV. Los mismos han sido producidos en el marco de un programa de Cooperación Internacional al Desarrollo cofinanciado por la Generalitat Valenciana.

Este proyecto de gamificación, traslada la mecánica de los juegos al ámbito educativo-profesional y desde el mismo tratamos de centrar la atención en las soluciones que existen, y su conexión global (interconexión de fenómenos globales y locales), a través de acciones comprometidas con una transición ecológica y justa. El objetivo principal es convertir puestos de trabajo en “empleos por el clima” a través de los principios de la Economía Circular, un eje que a su vez nos permite producir más con menos y generar empleos de calidad.

Así pues, con todo ello queremos dar relevancia a la labor de la educación ambiental también fuera del ámbito escolar, ya que en este proceso todos y todas tenemos un papel que jugar que tendrá efecto en las generaciones futuras, pero cuyo éxito depende en gran medida de nuestra acción colectiva del presente.

Enlace a los recursos didácticos.