Recién nacidos con patologías sin apenas supervisión y noches con una enfermera para reanimarlos a todos en La Paz
Los primeros bebés que nazcan este año en el Hospital de La Paz corren riesgo, especialmente si sufren algún tipo de patología. Es la situación que denuncian las enfermeras de Neonatología del clínico madrileño, que este mes presentaron una denuncia formal ante el juez de guardia advirtiendo de las ratios mínimas con las que afrontan el invierno. Aunque el problema, advierte el sindicato CCOO en un comunicado, se retrotrae a hace al menos dos años, es en estos últimos meses cuando la situación se ha vuelto “de alto riesgo” y completamente “insostenible”.
El sindicato ha informado este martes en un comunicado en el que se hace eco de la acusación: alertan de un “incumplimiento sistemático” de las exigencias recomendadas para la plantilla que ha de velar por los recién nacidos grandes y prematuros, simplemente prematuros o aquellos con enfermedades y problemas que requieran de cuidados espaciales, vigilancia intensiva o reanimación neonatal en partos o cesáreas.
Las enfermeras de La Paz, que según el mismo comunicado atendieron en 2024 a 1.516 recién nacidos, señalan “irregularidades” en la carga asistencial por las que dicen no poder garantizar cuidados de calidad ni una total seguridad para sus pacientes. El sindicato hace mención a eventos concretos que se produjeron mientras varias profesionales habían tenido que desplazarse de sus puestos habituales para atender otras tareas por falta de manos.
En ese tiempo, sostienen que hubo momentos en los que incluso un recién nacido ingresado en la UCI vivió una pausa respiratoria “sin que ningún profesional sanitario lo pudiera detectar”, de forma que “fue la madre quien tuvo que dar la voz de alarma”. Asimismo, afirman que durante al menos tres noches solo había una enfermera de REA (la unidad de reanimación) para atender a todos los prematuros, que precisaron de “dos reanimaciones cardiopulmonares avanzadas con necesidad de masaje cardiaco, administración de adrenalina y canalización umbilical”.
Ratios insuficientes que permanecen de forma “sistemática”
De acuerdo con la nota que difunde Comisiones Obreras, ha llegado a haber horas seguidas en las que solo había una enfermera por cada 10 pacientes convencionales y otra por cada ocho que requerían de vigilancia intensiva. La recomendación es que siempre haya una profesional por cada dos ingresados.
“En la Zona de Vigilancia Intensiva Neonatal tienen 19 puestos y está dividida en tres boxes: dos de cinco pacientes y otro de nueve, cuando el máximo debería ser de ocho por enfermera”, concluyen, haciendo hincapié en la “desproporción” que las sanitarias tratan de denunciar tras “dos años” señalando el problema sin éxito ante la a Dirección de Enfermería del hospital.
0