Decía Pedro Zerolo que los derechos de las personas LGTBI+ se luchan, se disfrutan y, una vez disfrutados, toca defenderlos. Da la sensación de que vivimos con cierta despreocupación en la fase intermedia, el disfrute, y nos cuesta recordar cómo era la vida antes de 2005, cuando una frase introducida en el Código Civil cambió a la sociedad española para siempre, haciéndola mejor: “el matrimonio tendrá los mismos efectos cuando ambos contrayentes sean del mismo o de diferente sexo”.
Lo cierto es que aunque a veces no lo queramos ver, la amenaza está ahí. Solo hay que echar un ojo a las iniciativas presentadas recientemente por la ultraderecha en todos los parlamentos autonómicos exigiendo la derogación de las leyes de igualdad LGTBI+. Hoy se ha logrado frenarlas. Mañana, quién sabe.
Llegados a este punto, se hace necesario explicar quién es Zeudi Di Palma y por qué es tan importante en esta narrativa. Zeudi es una chica bisexual que ganó el certamen de Miss Italia y que, actualmente, participa en un programa de máxima audiencia en su país y con una repercusión global, donde ha decidido presentarse ante el gran público tal y como es; una mujer no heterosexual. Esto, que debería ser algo sin importancia, sigue suponiendo un gesto valiente y necesario.
En Italia, las chicas como Zeudi van a colegios e institutos en los que se ha prohibido hablar de diversidad, crecen sabiendo que no se podrán casar con una mujer ni tener hijos en común. Todas estas mujeres viven en un sistema hostil que no las protege y que ha obrado con fuerza para bloquear leyes contra la violencia y los delitos de odio basados en la orientación sexual, como fue el caso de la llamada Ley Zan. Esa realidad social hace que hoy Zeudi tenga que soportar públicamente un escrutinio desproporcionado sobre sus sentimientos, acciones y reacciones. Cada día, desde hace tres meses, hay periodistas juzgando su forma de ser en las tertulias de la mañana, se ha afirmado repetidamente que su juventud le hace estar confusa sobre su orientación sexual e incluso el presentador del programa en el que participa ha osado preguntar al resto de concursantes su opinión sobre si es o no realmente bisexual.
Esta situación está impactando en miles de mujeres de España y de otros países del mundo que siguen el programa a través de las redes sociales. Mujeres que se indignan cada día al ver como se censuran los besos entre dos chicas, como se invalidan las relaciones no heterosexuales. Toda esa comunidad está entendiendo que lo que le pasa a una mujer en una punta del planeta nos afecta a todas y que, si nos organizamos colectivamente, podemos hacer grandes cosas y por eso hoy es tan importante Zeudi Di Palma.
Nosotras, las mujeres no heterosexuales, no somos una ciudad construida en una colina. Somos el jodido Ámsterdam, construido por debajo del nivel del mar y que no puede dejar de mirar y cuidar sus diques. Por eso, porque el retroceso siempre nos acecha, tenemos que disfrutar nuestros derechos, ¡claro que sí!, pero no podemos dejar de vigilar los diques que nos permiten vivir como vivimos y entre todas lograr que en aquellos lugares donde no existen, como Italia, se levanten de una vez por todas.
Hoy es Zeudi, ayer fueron otras, unámonos para que mañana ninguna mujer tenga que pasar por lo mismo.
*Esther Nevado es concejala del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Murcia
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