La Junta de Extremadura borró el concepto 'Memoria Histórica' del convenio de colaboración con las diputaciones

Borrar de un plumazo la memoria histórica o, al menos, el concepto. Ese es el motivo por el que las diputaciones de Badajoz y Cáceres, en manos del PSOE, se negaron el año pasado a firmar un nuevo convenio en la materia con la Junta de Extremadura.
Ambas instituciones provinciales han difundido un comunicado conjunto en el que explican que el Gobierno de María Guardiola propuso firmar un nuevo acuerdo entre las tres partes y la Universidad de Extremadura “donde se retiraba toda denominación o alusión a la memoria histórica”. En su lugar, El Ejecutivo propuso denominarlo 'Memoria e Historia de Extremadura en el Siglo XX' y en él no se hacía mención a la Ley de Memoria Histórica de Extremadura ni tampoco a ninguno de los convenios firmados desde el año 2003 ni a los logros conseguidos a través de estos acuerdos de colaboración entre instituciones que conforman el Proyecto Para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (PREMHEX).
Por todo esto, las diputaciones de Badajoz y Cáceres rechazaron firmar “ese borrador que se presentó sin diálogo previo al considerar que rompía con la línea de los convenios firmados hasta el momento”. Ante esta situación, la Junta les propuso la firma una nueva adenda en los términos del convenio aún vigente que “es aceptada sin ningún tipo de objeción” y que es la vigente en la actualidad. Según ese acuerdo, la Administración regional aporta 79.000 euros y las instituciones provinciales 24.000 euros cada una.
Con ello, las diputaciones han pedido una rectificación al consejero de Economía, Guillermo Santamaría, que las ha acusado este martes de haber rechazado la propuesta consensuada entre la Junta y la Universidad de Extremadura para un nuevo convenio de memoria histórica. Además, han indicado que están a la espera de recibir una nueva propuesta por parte del Gobierno extremeño para la firma de un nuevo acuerdo para 2026.
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