Así será Parque Ventas, la zona verde que cubrirá la M-30: vídeo de sus círculos, escenario y pasarelas serpenteantes

El Ayuntamiento de Madrid acaba de mostrar uno de sus proyectos estrella para el segundo mandato de Almeida, junto con los soterramientos de la A-5 y de Castellana Norte. Será Parque Ventas, la creación de una zona verde de casi 200 mestros encima de 16 carriles de la M-30 y que servirá para unir los distritos de Ciudad Lineal y Salamanca.

La cubrición la ejecutará FCC por 70,3 millones de euros, constructora se llevó el concurso convocado por el área de Obras y Equipamientos gracias a que obtuvo la mejor puntuación en la valoración del proyecto técnico, aunque que su propuesta era la más cara. La fecha de inicio de los trabajos aún no está cerrada pero arancarán el próximo mes de mayo o junio, indican fuentes municipales.

Pese a la envergadura de la actuación, las afecciones al tráfico previstas serán mínimas, ya que solo será necesario cortar un carril durante el próximo verano para colocar la estructura sobre la que irá asentado el nuevo parque. Para el resto de la actuación, que durará 22 meses, se producirán únicamente cortes puntuales nocturnos.

El Ayuntamiento ha publicado varias imágenes de cómo quedará el nuevo Parque Ventas. Y también un vídeo de cómo será el resultado final.

El espacio creado sobre la M-30 se conectará con los márgenes a través de ocho caminos con un diseño en forma de serpiente, para salvar el desnivel a través de una suave pendiente y que probablemente se convertirán en los elementos distintivos de este parque.

Las pasarelas se entrecruzaran en el parque para dar acceso al nuevo parque desde ambos lados de la M-30, llegando desde unas aceras situadas a mayor altura que la zona verde.

El nuevo entorno contará con zonas peatonales, ajardinadas y estanciales, siguiendo un diseño circular. Además, se instalarán juegos infantiles, equipamientos de calistenia, una pequeña zona de actuaciones al aire libre con un graderío de poca altura, dos kioscos, fuentes, bancos y papeleras. 

Uno de los aspectos polémicos de este proyecto era la posible desaparición de 54 árboles, que ahora el Ayuntamiento reduce a una decena de talas y solo en la zona Este, la de Ciudad Lineal. Los del parque de la Fuente del Berro serán todos conservados y las singulares pasarelas serpenteantes rodearán los ejemplares para evitar que tengan que ser eliminados. El número de nuevos árboles, que iba a ser 200, sube ahora hasta los 591. También llegarán  48.800 arbustos al entorno, ha informado el alcalde.

A nivel técnico la actuación supone montar una losa de hormigón de 197 metros de largo por 83 de ancho, con un canto de 2,7 metros. Los árboles se plantarán sobre una zona de tierra de 1,5 metros de altura. Las especies elegidas podrán extender sus raíces a lo ancho de esta franja para arraigar con fuerza, confían desde el consistorio.

Las pilas que sostendrán la plataforma estarán cimentadas por medio de pilotes con una profundidad de entre 16 y 17 metros. Por su parte, la cubierta estará formada por vigas prefabricadas dispuestas en 32 pórticos transversales a la M-30 con apoyos en los bordes largos del rectángulo que forma la plataforma y pilas intermedias colocadas en las tercianas (medianas que separan el vial principal de las vías auxiliares). Sobre esta plataforma crecerán 2.150 m2 de césped

La nueva plataforma se situará unos 300 metros al sur del Puente de Ventas, en las inmediaciones de la pasarela de Ramón de Aguinaga. Y vendrá acompañada de mejoras en ambos márgenes.

El itinerario de la calle de Ramón de Aguinaga, que actualmente desemboca en la pasarela del mismo nombre, se potenciará como acceso principal al nuevo espacio desde la zona suroeste, lo que se llevará a cabo transformando esta calle en vía de plataforma única, con nuevas escaleras que conectarán directamente con la actual pasarela de Ramón de Aguinaga sobre la M-30.

En el extremo norte del parque de la Fuente del Berro se remodelarán el parque infantil y el área canina existentes, a lo que se añadirá la reforma de la calle de Alejandro González y de la plaza de la América Española, que supondrán la conexión de la calle de Alcalá con el nuevo espacio sobre la M-30. La calle de Alejandro González será reordenada para facilitar el tránsito y en la plaza de la América Española, se peatonalizará la parte este del actual anillo de circulación.

En el lado de Ciudad Lineal, se remodelarán completamente todos los espacios libres que existen entre los bloques de viviendas y la M-30 en el entorno de la calle de Antonio Pirala, donde se reordenará el interior del parque. El objetivo es recuperar un espacio residual en desuso en la actualidad, conectándolo en sus nodos principales con el nuevo espacio que cubrirá la M-30 y mejorando, a su vez, las vías de conexión transversal con el barrio de Ventas.

Este flanco contará con un nuevo paseo peatonal cuya anchura se ampliará gradualmente hacia el norte. La zona contará con espacios infantiles, deportivos y para mayores. Por su parte, el espacio reservado actualmente al tráfico rodado se integrará con el paseo peatonal, generándose un vial de coexistencia en plataforma única.

El proyecto también incluye el sector situado más al norte del parque de Antonio Pirala, que conecta con la calle de Alcalá. Se trata de un espacio estancial a medio camino entre un parque y una plaza que será reorganizado para potenciarlo como espacio de encuentro. 

Oposición de asociaciones al proyecto

Asociaciones vecinales de los distritos afectados, Ciudad Lineal y Salamanca, junto a Ecologistas en Acción y la Plataforma por el Derecho a la Ciudad, publicaron hace unos días un comunicado de oposición al proyecto debido a su alto coste y a las afecciones ambientales que conllevará su construcción.

Las organizaciones sociales y vecinales han habilitado un espacio de encuentro denominado Plataforma de Afectados M-30 con la que tratan de conseguir que el Ayuntamiento atienda a “los intereses reales de los barrios afectados por el proyecto, abandone la cubrición del tramo previsto e impulse el estudio y desarrollo de propuestas serias de reducción del impacto de la M-30 en todas las zonas afectadas”. También aseguraron que “una obra de esta envergadura no se puede ejecutar sin afectar de forma importante a la vida diaria de la ciudadanía que vive en las zonas afectadas y sin estar justificada por un claro y evidente beneficio para los barrios afectados”, señalan.

La oposición ha criticado que el proyecto actual se parece poco al que prometió el alcalde Almeida durante su última campaña electoral, y cree elevado el presupuesto que dedicará el Ayuntamiento para conectar dos barrios unidos actualmente por una pasarela cercana.